La fertilidad de las mujeres disminuye cuando la edad aumenta, y cada vez son más los expertos en este campo que recomiendan no posponer la edad de embarazo a más de 35 años.
La fertilidad femenina comienza a reducirse a partir de los 35 años, y suele ser casi nula a partir de los 43. Se estima que, para el 95 por ciento de las mujeres, a los 30 años ya sólo está presente el 12 por ciento de los ovocitos (gameto hembra que participa en la reproducción) , y que a los 40 años queda menos de un 3 por ciento. Y lo más importante es que este proceso no sólo afecta a la cantidad si no también a la calidad.
También el riesgo de aborto, de síndrome de Down y otras anomalías en los cromosomas aumentan con la edad.
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