lunes, 11 de junio de 2012

Milagros en el mundo de la medicina



1.Médicos de Nueva York califican de "milagro" la recuperación de un limpiaventanas que cayó desde un piso 47
 
El 7 de diciembre, este ecuatoriano de 37 años limpiaba cristales con su hermano Edgard en un edificio de la calle 66. Estaban en el piso 47 cuando los cables que sostenían su andamio se rompieron. Los Moreno, sin arneses, cayeron. 125 metros de altura. Edgard murió. Alcides, que quizá evitó un impacto mortal asiéndose tumbado a la plataforma de aluminio, estaba sentado y aún consciente cuando los bomberos llegaron.
Sus lesiones eran brutales. No se golpeó la cabeza pero vio afectados su cerebro, su columna vertebral, su abdomen, su pecho... Tenía rotas costillas, el brazo derecho, las dos piernas... Recibió 24 unidades de sangre, suficientes para renovar toda la de su cuerpo dos veces, y 12 unidades de plasma.


 2.

OBJETO MAS GRANDE

REMOVIDO
 
El objeto más grande que ha sido removido de un cráneo humano fue un cuchillo de aproximadamente 20 cm (8 pulgadas) de la cabeza de Michael Hill de 31 años de edad. En abril de 1998, Michael abrió la puerta de la casa de su amigo y fue atacado recibiendo una puñalada en la cabeza. Logró caminar hasta la esquina y llegar a la casa de otro amigo. Cuatro horas después removieron el cuchillo de su cabeza. Michael salió una semana después de ser tratado en el hospital, pero ni siquiera sufriendo una infección ni nada. Desde su encuentro cercano con la muerte, la memoria de Michael quedó afectada y requiere de medicamentos para prevenir ataques epilépticos.





Médicos de Nueva York califican de "milagro" la recuperación de un limpiaventanas que cayó desde un piso 47


No es frecuente que los médicos empleen el término "milagro". Pero en el Hospital Presbiteriano Weill Cornell, en Manhattan, no se encuentra otra forma de explicar la historia de Alcides Moreno. El 7 de diciembre, este ecuatoriano de 37 años limpiaba cristales con su hermano Edgard en un edificio de la calle 66. Estaban en el piso 47 cuando los cables que sostenían su andamio se rompieron. Los Moreno, sin arneses, cayeron. 125 metros de altura. Edgard murió. Alcides, que quizá evitó un impacto mortal asiéndose tumbado a la plataforma de aluminio, estaba sentado y aún consciente cuando los bomberos llegaron.
Sus lesiones eran brutales. No se golpeó la cabeza pero vio afectados su cerebro, su columna vertebral, su abdomen, su pecho... Tenía rotas costillas, el brazo derecho, las dos piernas... Recibió 24 unidades de sangre, suficientes para renovar toda la de su cuerpo dos veces, y 12 unidades de plasma.

Sin precedentes
Aquel 7 de diciembre, en la sala de urgencias, sin esperar a llevarlo al quirófano, le operaron el abdomen. Siguieron nueve operaciones ortopédicas, otras cuatro en el abdomen, una traqueotomía, un coma inducido... Ayer, Alcides Moreno entraba otra vez al quirófano para someterse a una operación de columna. Pero si estaba en boca de todos es porque el jueves los médicos y su esposa, Rosario Moreno, dieron una rueda de prensa detallando la recuperación milagrosa, o al menos "sin precedentes", de este hombre que cayó del cielo.
"Lo había visto todo, o al menos eso creía, hasta que sucede algo como esto", explicaba el doctor Philip Barie, jefe de cuidados intensivos del hospital. "Si crees en milagros, éste es uno. Estamos muy satisfechos ¿o me atrevo a decir asombrados? ante el nivel de recuperación de este paciente. Y aunque queda trabajo por hacer, somos muy optimistas".
Ese optimismo ha llevado al doctor Barie y sus colegas incluso a plantear la posibilidad de que, tras un año de intensa rehabilitación, Alcides Moreno vuelva a caminar. Y su caso les resulta aún más destacado por la falta de precedentes. Hasta ahora, el más sorprendente que habían tratado los doctores neoyorquinos del Weill Cornell era el de un hombre que sobrevivió a una caída desde 19 pisos, ni siquiera la mitad de altura desde la que cayó Moreno. Aseguran, además, que cerca del 50% de las caídas desde tres o cuatro pisos acaban siendo fatales. Y el jueves en la rueda de prensa explicaban que a la mayoría de quienes caen desde 10 pisos o más ni siquiera les ven. "Normalmente van a la morgue".

Caricias, riña y sorpresa
Como para los médicos, la recuperación de Alcides Moreno es un milagro para su esposa, Rosario, que fue quien el 25 de diciembre escuchó hablar por primera vez a su esposo tras el coma. Ella era quien estaba siempre junto a su cama, junto a los respiradores y las máquinas, haciéndose caricias en la cara con la mano de su esposo comatoso, confiando en que las sensaciones le harían volver.
Ese día de Navidad, fue él quien extendió su mano, pero no tocó a Rosario, sino a una enfermera. El personal médico rió, pero en cuanto abandonaron la habitación, Rosario regañó cariñosamente a Alcides. "Se supone que no tienes que hacer eso--le dijo--tocas a tu esposa, no a las enfermeras".
Entonces llegó la sorpresa. Alcides volvió la cabeza y, en inglés, le dijo "¿Qué he hecho?". Era la primera vez desde el 7 de diciembre en que hablaba. Rosario "no sabía que podía hablar".
Ahora quedan muchos retos por delante además de la recuperación. Las facturas médicas tienen seis ceros y aunque tres agencias de la ciudad investigan lo ocurrido, la familia ya ha presentado demandas contra el dueño del edificio, el gestor y la empresa de limpieza de ventanas.
Mientras, la recuperación y las palabras continúan. Rosario había llevado ya una vez antes a dos de sus hijos, Michael, de 14 años, y Mariah, de ocho, a ver a su padre para que le creyeran cuando les decía que, a diferencia de su tío Edgar, no estaba muerto. Y cuando llevó después de Navidad al más pequeño, Andrew, de seis años, este le dijo a su padre. "Te he echado de menos, papi". Y él contestó: "Yo a ti más".







HOMBRE SOBREVIVE A

DOS ACCIDENTES AEREOS


Rob De Knecht, un ciudadano holandés, viajaba el pasado día 19 en un avión con destino a Irak que, al aterrizar en Estambul para hacer escala, patinó por la pista y chocó de frente con un poste de iluminación, según explica la agencia holandesa ANP.
Sólo seis días después estaba a bordo del aparato de Turkish Airlines procedente de la capital turca que se estrelló poco antes de aterrizar en el aeropuerto de Amsterdam, por causas aún desconocidas, y causó la muerte a nueve personas y heridas a más de ochenta.
De Knecht tiene cuatro costillas rotas como consecuencia del accidente.
El hombre recuerda que el comandante del aparato avisó, como es habitual, a la tripulación y al pasaje de la cercanía del aterrizaje y sólo unos segundos después el aparato se había desplomado, roto en varios trozos.







EL HOMBRE MAS OBESO DEL MUNDO


Manuel Uribe, el hombre más gordo del mundo según el Libro Guinness de los Records, llegó a pesar 560 kilos.



Durante años se ha sometido a muy diversas dietas y tratamientos para adelgazar, controladas por científicos y especialistas, consiguiendo perder la impresionante cifra de 215 Kg. Por ello, los responsables de la próxima edición del Libro Guinness se están planteando otorgarle el premio a la persona que más kg. ha conseguido perder
Manuel llevaba más de 20 años confinado en su casa, ya que le era imposible moverse por si mismo, y era muy difícil y peligroso transportarlo con grúas especiales, sin hablar de las reformas que tendría que hacer en su casa para tal fin. Ha recibido ayuda de diferentes fuentes, tales como su propia Fundación Manuel Uribe, que ayuda a los que padecen su enfermedad. La comunidad científica de diferentes países se ha vinculado con Manuel Uribe, y han diseñado una estrategia para disminuir un porcentaje considerable del peso. Básicamente, se centran en dietas estrictas específicas para su cuerpo, en productos que evitan absorber grasas y otros nutrientes dañinos, operaciones de liposucción para extraer grasas, by-pass gástrico y otras técnicas para reducir la capacidad del estómago y la absorción intestinal. Los médicos, dietistas y cirujanos que lo han intervenido proceden de España (Cataluña), EEUU y México.




Manuel ha comentado públicamente que está muy contento de haber perdido más de 200 kilos en los últimos años, aunque le agrada el premio al más obeso que le han otorgado. Aseguró que después de haber perdido tantos kilos y se lo permitan los médicos, saldría a la calle y montaría una fiesta para celebrarlo. Y así fue:



[
size=12]Ayudado por un montacargas, Manuel consiguió salir de su casa, y montado en un remolque paseó por las calles de Monterrey, donde muchas personas lo estaban esperando para celebrar la jornada gloriosa de este entrañable hombre.
¡Felicidades Manuel!
[/size]

SUCESO INSÓLITO EN LA HABANA


Un insólito accidente ocurrió el pasado viernes 11 de abril, a las diez de la mañana, cuando el anciano, de 77 años, José González Padrón, cayó hacia la calle tras desplomarse una parte del balcón de su casa, situada en el número 1851, de la Calzada del Cerro, esquina a Peñón, en Ciudad de La Habana, y se salvó increíblemente.
“Estaba sentado en una silla en el extremo del balcón de su vivienda, que da hacia la Calzada del Cerro y de pronto se desprendió el pedazo de piso donde descansaba y lo vi caer estrepitosamente hacia la calle, pero cayó sentado sobre dos cables eléctricos y pudo salvarse”. El testimonio lo brindó a Juventud Rebelde, Amaury Juig Lemus, conocido como “El Chino” y vecino de la calle Piñera, en el municipio del Cerro, quien pasaba en ese instante por el lugar y vio el insólito suceso. “Varios trabajadores que venían en un camión —confirmó El Chino— intentaron armar un andamio para bajar al señor, pero no pudieron hacerlo. Pasaron unos 30 minutos mientras apareció una “palita” mecánica de recoger escombros, de la obra de construcción de una clínica dental frente al Policlínico Docente del Cerro, en la que tres personas lo rescataron”.
El anciano del accidente, por su parte, comenta: “Cuando llevaba como tres minutos sentado, ¡blum, pa’bajo! Yo no me di cuenta de nada. Fue todo tan rápido que apenas atiné a sostenerme con una mano de uno de los cables, el más gordo de los dos, y con la otra de un hierro empotrado al edificio, sin dejar caer las muletas. Una amiga desde abajo me gritó: “¡Pepe, tirame las muletas! y así lo hice”.
En una “palita” mecánica tres personas desconocidas para él, llegaron hasta donde estaba colgando y lo rescataron. Al llegar la ambulancia, los médicos le hicieron un electro y le tomaron la presión. Como es hipertenso, la tenía por las nubes, pero no ocurrieron otras complicaciones. Los escombros del balcón y la silla donde estaba sentado, cayeron hacia la acera y decenas de personas se fueron aglomerando para ver el “espectáculo”.
“¡Tranquilos, que yo estoy bien”, era lo que decía el accidentado, desde seis metros exactos de altura, tratando de calmar a la multitud de personas que desde la calle le gritaban que no se moviera ni mirara para abajo, para que no fuera a darle vértigo y se cayera. Mientras, en la calle, un grupo de transeúntes se disponía a recibirlo “de aire” para impedir que se matara.
José González, más conocido por “Pepe”, natural de Pinar del Río, pero residente en La Habana desde 1948 y en la casa del accidente, hace más de dos décadas, está aún convaleciente de una reciente operación por fractura de la cadera izquierda, anterior al accidente. Los cables que le sostuvieron en el momento de su caída —ambos de 220 voltios— son totalmente nuevos y revestidos de un material aislante fuerte y grueso que impidió males mayores.
"Nada, ¡yo tengo tremenda suerte! Y, además, aún no me toca", dijo "Pepe", sonriente.



ABORTO


Lo acabo de leer en la prensa y se me ha revuelto el estómago. Asesinatos brutales de niños y niñas en el útero materno. La madre no se entera. A ella no le duele nada en ese momento. Pero… ¿y después? ¿y al ver en las noticias la clínica donde ella fue a abortar? ¿Cómo se puede dormir y vivir el día a día, sabiendo que he matado a un ser inocente?
A fuerza de repetir que un feto es como un grano que debe ser extirpado para preservar nuestra salud, hemos conseguido matar también los gritos de los inocentes. No son personas, nos dicen. Son fetos. Eso no es matar, se repiten. Es interrumpir el embarazo no deseado… y madres, legisladores, médicos, amantes y maridos miran para otro lado. Lo mejor, no pensar en eso y a otra cosa…



link: http://www.videos-star.com/watch.php?video=5mgGdd0ZYTU&feature=PlayList&p=BACA256D3C42132E&index=0&playnext=1

En esta sociedad que busca el placer a cambio de nada, nos estamos convirtiendo en verdaderos asesinos, cómplices con nuestros silencios, a fuerza de no pensar.
Respiramos. Contemplamos la belleza de la vida. Luchamos por traer a casa una pizca de felicidad en nuestro devenir cotidiano. Nos rebelamos cuando nos pisotean nuestros derechos a ser personas… ¿y ellos? ¿Cuántos son? ¿Por qué no se les ha dado una oportunidad? ¿No lloras? Yo sí. Y pienso que no hago lo suficiente para parar esto. Y pido perdón a Dios.
Si lees estas líneas, escucha la canción de Nena Daconte. Ella tuvo la valentía de reconocerlo:





link: http://www.videos-star.com/watch.php?video=v5i2qzFG5eA




No al ABORTO… SI a la VIDA!!



TAXISTA SE SALVA DE MORIR

APLASTADO POR UN CAMIÓN

No hay comentarios:

Publicar un comentario